«El Palecete de Loyola promete ser, luego de 30 años en el abandono, un espacio para ampliar la construcción del socialismo y Revolución Bolivariana, con cimientos sociales y culturales, fundamentados en el rescate de la identidad, creencias y valores ancestrales…» Con esa rimbombancia digna de «prometedores de oficio» el saliente gobierno de Francisco Arias Cárdenas anunció la recuperación total del Palacete de Loyola, estructura de la época colonial de imponente arquitectura y belleza, situada en la calle Doctor Quintero, con Doctor Portillo, donde una vez funcionó el Palacio de Gobierno de la entonces Provincia de Maracaibo. Se aprobaron 20 millonejos para la recuperación del espacio y lo único que hicieron fue quitar el tétrico parque de diversiones en ruinas que se situaba en los patios del edificio y nada más, por lo que cabe preguntarse ¿Dónde están los 20 millones?.
«Será un espacio para la vida y la paz». Con esos términos, tanto Giovanni Villalobos, entonces secretario de Cultura, como Mariela Quintero, entonces directora de Turismo, proyectaron lo que sería el Palacete en 2016.
Prometieron además, reubicar a las personas que «invadieron» el Palecete por falta de viviendas y que tienen en él, arruinado y todo, un techo para dormir.
«La cultura, el arte y la academia tendrían en el Palacete de Loyola el mejor sitio de encuentro para desarrollar ideas y actividades que dignifican al ser humano, que permiten la expresión de la idiosincrasia y la memoria histórica de la región. Además del valor histórico, esta edificación es un tesoro arquitectónico que guarda en sí mismo un magnánimo arte en su composición», palabras de Villalobos que, entonces, emocionaron, pero que terminaron en nada.
El engaño
Desde el pasado 10 de julio de 2015, sí, leyó bien 2015, se iniciaron los «trabajos de recuperación» del Palacete. Ingresó allí cualquier cantidad de maquinaria pesada para desalojar los patios de cuanta chatarra hubiese y lo hicieron, pero visiten hoy el Palacete y, si bien no están los amasijos de hierro, hay monte y culebra.
En varios programas de radio y televisión, la directora de la Corporación de Turismo, Mariela Quintero se encargó de «alardear» sobre el «emporio cultural» del Palecete, un proyecto que en la mente y en el imaginario colectivo sonaba demasiado primermundista para un país y una región que tiene varios años consecutivos descendiendo a niveles más bajos que un llamado tercer mundo.
«Más de ocho mil 450 metros cuadrados serán utilizados para los ‘espacios de la paz en la vida’. La manzana completa será restaurada y entre los proyectos a construirse está la Casa del Artista como centro cultural para los zulianos y un parque para el disfrute de áreas verdes» dijo Villalobos y refrendó después Quintero.
«El comandante Arias Cárdenas ordenó al CRU y a la Secretaría de Cultura del estado que cuanto patrimonio tangible pudiéramos rescatar, nos pusiéramos a la tarea. Es por ello que se han restaurado varias estructuras de la ciudad», explicó Giovanny Villalobos.
¿Garantías?
Giovanny Villalobos, informó a La Verdad que el gobernador Francisco Arias Cárdenas, aprobó ayer las siete viviendas que se otorgarán a las familias que durante años hicieron vida dentro de la estructura del Palacete de Loyola. Dijo que a pesar de que esta es una responsabilidad de quienes eran propietarios del lugar, el Gobierno no dejará sin hogar a las más de 30 personas, incluyendo niños, que viven allí. «Estamos evaluando el lugar en el que serán asignadas las casas, a través de la misión Vivienda». Aseguró que una vez inicien los trabajos de remodelación tardarán seis meses para que se vean los primeros resultados. «Este lugar era una vergüenza para la ciudad. Ahora será un espacio para la cultura. Haremos un gran parque verde con una concha acústica y una galería de historia».
Proyectos
La Secretaría de Cultura promoverá un concurso abierto que se realizará a nivel nacional para escuchar las diferentes propuestas sobre los proyectos que pueden llevarse a cabo en el espacio. El gobernador del estado, Francisco Arias Cárdenas, ya asignó 20 millones de bolívares para iniciar la restauración.
«Nosotros tenemos al profesor Evaristo Pérez, director de patrimonio del estado, y tenemos al Sistema de Protección de todo el estado Zulia. Si este edificio lo agarramos como emblema y montamos el Sistema de Protección del Patrimonio Tangible e Intangible del Zulia, figúrate lo que podemos hacer», mencionó Villalobos.
Además, recalcó que dentro del proyecto está pensado hacerse la Casa del Artista para prestar servicios médicos a los artistas de las distintas ramas del arte. También funcionará allí el Sistema de Orquesta y una galería de arte para exposiciones.
Villalobos, informó a La Verdad que el gobernador Francisco Arias Cárdenas, había aprobado siete viviendas que se otorgarán a las familias que durante años hicieron vida dentro de la estructura del Palacete de Loyola. Dijo que a pesar de que esta es una responsabilidad de quienes eran propietarios del lugar, el Gobierno no dejará sin hogar a las más de 30 personas, incluyendo niños, que viven allí.
«Estamos evaluando el lugar en el que serán asignadas las casas, a través de la misión Vivienda». Aseguró que una vez inicien los trabajos de remodelación tardarán seis meses para que se vean los primeros resultados. «Este lugar era una vergüenza para la ciudad. Ahora será un espacio para la cultura. Haremos un gran parque verde con una concha acústica y una galería de historia». ¿verdad? ¿Y qué pasó entonces?
Polémica decisión
El entonces secretario de Cultura dijo se desocuparían los comercios legales e ilegales que se encuentran en los alrededores de la zona. Estos, al contrario de las familias, no serán reubicados ni remunerados, puesto que no están acorde a la Le. Otro engaño, los comercios no solo siguen allí, sino que se han expandido.
Villalobos hizo un llamado a las personas que tienen en su poder piezas que son parte del Palacete. «Hace años algunas personas vendieron ciertas obras que se encontraban en la azotea y que tienen un gran valor artístico. Le pido a esas personas que las devuelvan y que nosotros les podemos hacer una copia para que la tengan».
Historia
Un palacete es una mansión lujosa parecida a un palacio, pero más pequeña, usada como casa de recreo o residencia por familias privilegiadas. El primero en habitarlo en 1926 fue Joshua Da Costa Gómez, su constructor. Y en 1928 se convirtió en la residencia del presidente del estado Zulia Vicencio Pérez Soto.
A partir de allí pasó por mano de varios propietarios: El Banco de Venezuela en 1935, W. Büsing, por el Colegio Alemán de Maracaibo, en 1938; Francisco Quintero, quien lo arrendó al Colegio La Presentación, al Instituto de Comercio de Maracaibo y a la Escuela de Artes Plásticas Julio Árraga.
Desde entonces, se ha convertido en un tesoro en ruinas, recuperable, pero en ruinas que sirve de cobijo a familias -al menos diez- que sin gozar del derecho fundamental a la vivienda hicieron de esta mansión su espacio para vivir.
NOTIZULIA / Con información de La Verdad, Versión Final y Panorama
