«Noche de emoción me invitan aquella del saladillo cuándo al son del estribillo el pueblo espera la hora de que le llegue la aurora y aparezca la Chinita y ella se asoma bonita y el pueblo de emoción llora»
Con emoción y fe la feligresia acompañó a la Sagrada Dama del Saladillo en su última procesión de este año con la que cierra su festividad.
Como ya es tradicional, el primer domingo de diciembre se realiza la procesión de la aurora; la Virgen recorre diferentes sectores de la ciudad hasta el amanecer y, este año coincidió con el primer domingo de adviento inicio de un nuevo año litúrgico propicio para que una vez más la Chinita bendijera de manera especial a sus hijos en una de las procesiones más esperadas y queridas por la feligresía mariana.
A las 11:00 pm inició la Santa Misa, presidida por el párroco Nedward Andrade en el santuario Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá. Terminada la eucaristía, la imagen Sagrada salió en procesión por las principales calles del casco central de Maracaibo, acompañada por la feligresia, los devotos y al son de las bandas musicales que anunciaban su paso.
Durante la madrugada la Chinita recorrió y se detuvo en diferentes sectores de la ciudad, emulando su visista a Santa Isabel, recibiendo veneración y las oraciones de sus fieles devotos.
El sol comenzaba a salir cuando Chiquinquirá entraba a la plaza de San Juan de Dios y los fieles con lágrimas la recibian al golpe de la gaita tradicional del “Barrio Obrero de Cabimas” con sus temas hechos oración.
Al son de la gaita el Sagrado Retablo entró al templo para ser subido a su nicho por los servidores marianos.
Así culmina la festividad de Chiquinquirá 2024. Salve Reina, bendice a tus hijos.