M. Velazquez (Practicante UNICA)
Entre tantas de las zonas afectadas en la ciudad, el sector Lilia Perozo de Zambrano, ubicado en la parroquia Luis Hurtado Higuera, se suma a las quejas por falta de agua, lo usual es que llegue cada dos semanas o menos y se mantenga por dos o tres días, pero, no es así.
Últimamente, como muchos otros sectores, están sufriendo para cubrir algunas necesidades en las que es importante contar con este servicio, llegaron al punto de “moderar” lo poco que les queda para que alcance a la hora de preparar comida o asearse.
No todos los habitantes corren con la misma suerte de poder racionar el agua a estas alturas, los casos varían según el número de familiares que hay en cada hogar y la forma de cómo almacenan el líquido, sea en pipas o tanques.
“Ya pasaron los 15 días y nada. Ya estamos secos”, expresó uno de los vecinos residentes del sector.
Quien añadió que así como se las ven “complicados” en casa, hay muchas escuelas cercanas, por lo que es un motivo importante para que los niños puedan asistir, las escuelas deben estar en óptimas condiciones, lo que incluye contar con agua limpia.
“No quieren bombear para que los cisternas sigan rondando y haciendo su platica”, es lo que más se dice en las calles mientras los vecinos esperan a que vuelva el servicio.
