Cada madre es única y valiosa. De eso no hay duda y queda evidenciado con el caso de Danielle Dick, una mujer estadounidense que decidió retrasar su tratamiento contra el cáncer para poder dar a luz a sus hijos gemelos.
La hermana de Danielle, Rachel Miller, contó a través el sitio web de recaudación de fondos GoFundMe, que en el año 2010 a la joven madre le detectaron un lunar extraño en la espalda. Los médicos descubrieron que se trataba de un melanoma, un tumor maligno que genera un cáncer agresivo a la piel, reseñó ACI Prensa en su web.
En el 2015, tras una operación y continuos exámenes médicos, Danielle quedó libre del cáncer y ese mismo año nació sin complicaciones su hija Taylor.
En diciembre de 2016, Danielle se enteró que estaba embarazada de nuevo, esta vez de gemelos; y no fue hasta las 17 semanas de gestación que empezó a sentir fatiga, dolores de cabeza y a tener dificultades para hablar.
Su esposo Tyler la llevó al hospital y descubrieron que tenía tres tumores en el cerebro y otros dos en la zona abdominal, que se habrían originado por el melanoma extirpado años atrás. En mayo de 2017 le hicieron una cirugía para retirarlos.
Según informó el periódico Daily Mail, los doctores le dijeron que tenía un 20% de probabilidades de sobrevivir si comenzaba a recibir un tratamiento agresivo de radioterapia y quimioterapia. Sin embargo, ella se negó porque este podía dañar a sus bebés.
Danielle logró llevar el embarazo hasta las 29 semanas y los gemelos Colby y Reagan nacieron prematuramente en julio de 2017, pesando cada uno poco más de un kilo.
Rachel Miller indicó que “las placentas fueron examinadas para descartar la presencia de un melanoma, ya que ha habido casos raros de que este ha sido transferido a los bebés”. Felizmente los médicos no encontraron tumores y Colby y Reagan han crecido sin problemas de salud.
Luego de dar a luz, los médicos aplicaron a Danielle un tratamiento intenso, pero el cáncer hizo metástasis y aparecieron nuevos tumores en su cerebro y espalda. Además, desarrolló una infección.
Tras una intensa lucha, esta madre de 32 años murió el pasado 26 de abril en el hospital MD Anderson de Houston, en Texas. Su esposo, con quien estuvo casada nueve años, permaneció a su lado hasta que falleció.
Su familia había lanzado una campaña en GoFundMe para ayudar con los gastos de su tratamiento. Actualmente están apoyando a Tyler.
Antes de dar a luz, señaló el Daily Mail, Danielle realizó una exhortación a la gente para que sean conscientes del peligro que supone el cáncer de piel, ya que este “es algo que no se debe dejar de lado”.
“Las personas tienen que realizarse chequeos de piel y usar bloqueador solar. La gente suele pensar que (el cáncer de piel) es más tratable, pero si ocurre una metástasis la prognosis no es buena”, expresó la joven madre.
NOTIZULIA / Agencias