Lentamente llega ayuda a Turquía y Siria tras terremoto que deja más de 24 mil muertos

Lentamente llega ayuda a Turquía y Siria tras terremoto que deja más de 24 mil muertos

Rafael E. Fernández

La ayuda internacional llega lentamente el sábado a partes de Turquía y Siria devastadas por el masivo terremoto, que dejó más de 24.000 muertos y cientos de miles de personas en necesidad.

El frío gélido en la zona dificulta los rescates y redobla el castigo sobre una población desesperada. Según la ONU, al menos 870.000 personas precisan urgentemente comida y, solo en Siria, 5,3 millones de personas se quedaron sin casa.

“Cuando veo los edificios destruidos, los cadáveres, no es que no pueda ver dónde estaré en dos o tres años, es que no puedo imaginar dónde estaré mañana”, dijo con los ojos llenos de lágrimas Fidan Turan, una pensionista en la ciudad turca de Antakya (sur).

“Hemos perdido 60 miembros de nuestra familia extensa”, explicó. “¡Sesenta! ¿Qué puedo decir? Es la voluntad de Dios”, agregó.

El Programa Mundial de Alimentos pidió 77 millones de dólares para aportar raciones de comida a al menos 590.000 personas desplazadas a causa del terremoto en Turquía y 284.000 en Siria

Acceso humanitario

La oficina de Derechos Humanos de la ONU urgió el viernes a todas las partes en la zona afectada, donde operan militantes kurdos y rebeldes sirios, a permitir el acceso humanitario.

El Partido de los Trabajadores del Kurdistán, considerado grupo terrorista por Ankara y sus aliados occidentales, anunció que suspendía su lucha armada para contribuir a los trabajos de recuperación.

Y en Siria, el gobierno anunció que autorizará el suministro de ayuda internacional a las zonas controladas por los rebeldes en el noroeste del país, castigado por el sismo.

Hasta ahora, solo dos convoyes humanitarios habían cruzado esta semana desde Turquía a esta área rebelde donde viven cuatro millones de personas.

La ONU solicitó un alto el fuego inmediato en el país y la apertura de más puntos de paso para la ayuda humanitaria, que ahora mismo solo puede transitar por el puesto fronterizo de Bab al Hawa.

El Consejo de Seguridad debe reunirse para discutir la situación en Siria, posiblemente a principios de la próxima semana.

La diplomacia turca afirmó que está trabajando para abrir otros dos puntos de paso “con las regiones bajo el control del gobierno” sirio, “por razones humanitarias”.

Por miedo a volver a sus casas o porque estas han desaparecido, miles de personas duermen en tiendas de campaña o en sus coches y se reúnen junto a hogueras para calentarse en medio de unas temperaturas glaciales.

“Los pisos se apilan”

Aunque los equipos de rescate siguen sacando a personas vivas de entre los escombros, entre ellos varios niños y una mujer embarazada de seis meses el viernes, los balances no dejan de crecer.

Los últimos cómputos del sábado por la mañana se sitúan en 24.218 personas muertas, 20.665 de ellas en Turquía y 3.553 en Siria.

Después de cinco días del sismo, el más mortífero desde 1939 en la región, la conmoción inicial deja paso en Turquía a la rabia y el enfado por la respuesta del gobierno y la baja calidad de las construcciones.

AFP