Un fenómeno meteorológico extremo como la DANA también puede ocurrir en la Argentina

Un fenómeno meteorológico extremo como la DANA también puede ocurrir en la Argentina

En la Argentina, también puede ocurrir una DANA, aunque generalmente el concepto pasó más inadvertido. Un ejemplo es el de la inundación que afectó a la ciudad de La Plata, la capital de la provincia de Buenos Aires, y sus alrededores en 2013.

Los investigadores de la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la Universidad Nacional de La Plata, Melissa Pantanella y Nazareno Giletto, hicieron un estudio sobre el desastre, que fue publicado por el Servicio Meteorológico Nacional de Argentina (SMN).

Señalaron que un evento de baja segregada o DANA se desarrolló entre el 30 de marzo y el 5 de abril de 2013 y tuvo un ciclo de vida de cuatro etapas: inicio, segregación, madura y disipación.

Se destacó que la mayor precipitación se registró en la ciudad de La Plata, con un acumulado total de 392,2 mm en el Observatorio de La Plata entre el 2 y el 3 de abril. El evento causó muertes y pérdidas económicas cuantiosas.

Estimaron que el evento tuvo una duración media de 7 días, superior al período típico de duración de bajas segregadas durante el otoño en el sur de América del Sur, que es de 5 días.

En diálogo con Infobae, Diego Araneo, investigador en ciencias de la atmósfera del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA), del Conicet en Mendoza, contó que “en Sudamérica se registran 17 fenómenos de DANA por año”.

Casi todas las DANA que ocurren en esta región del mundo “pasan por la Argentina debido a las latitudes en las que se encuentra nuestro país”. La particularidad en Sudamérica es la presencia de la cordillera de los Andes

“Por un lado, el cordón montañoso ayuda a que algunos sistemas de baja presión de altura queden atrapados del lado occidental y terminen separándose de la circulación normal”, afirmó.

“Por otro lado, cuando se genera el fenómeno, le cuesta pasar la cordillera de manera intacta. Por eso, se debilita y luego puede regenerarse más sobre el noreste o la región de la Pampa húmeda. Así se puede formar una ciclogénesis y pasa a ser un sistema de baja presión en superficie”, dijo el doctor Araneo.

Infobae