De Bs 6.500 que costaba el kilo de carne la semana pasada, ya subió a Bs 8.000. Los vendedores no se explican por qué todas las semanas sus proveedores les aumentan el precio, por lo que aseguran que llegará a los Bs 10.000 a final de mes.
“Cada vez que hacemos el pedido nos aumentan. Ya no sabemos por qué sucede esto, pero tenemos que comprarlo al precio que llegue. La gente no entiende que es debido a esto que tenemos que hacer los ajustes”, dijo Gilmer Castro, vendedor del mercado municipal de Maiquetía.
Indicó que por esta razón lo que la gente está llevando es carne para sopa, en Bs. 3.500 el kilo, porque es la más barata, o la molida en Bs. 7.500 que es la que más rinde.
“Se quejan más y compran menos”
Su elevado precio ha hecho descender su consumo. Quienes antes compraban un kilo de carne de primera, ahora prefieren los cortes de segunda como costillas, molidas, para desmechar y guisar o llevan solo medio kilo.
A pesar de que el precio en los mercados comunitarios es más bajo porque no utilizan bandejas ni envoplast para entregar el pedido, los vendedores aseguran que cada vez son menos quienes que prefieren comprar carne porque se ha vuelto un lujo.
“Ahora pedimos la cantidad que sabemos se van a llevar los clientes, pues lo que antes vendíamos durante un fin de semana, ahora nos puede llevar una semana completa”, destacó José Mata.
Mencionó que cada vez son más los clientes que solo piden medio kilo de carne de segunda, pues el dinero no les alcanza para comprar más.
Por otro lado, señaló que en su establecimiento aceptan tarjetas de débito, crédito y de alimentación. “Los clientes están utilizando más sus tarjetas de crédito para ir pagando su consumo poco a poco”.
NOTIZULIA / La Patilla
