Notizulia / Agencia
Los cigarrillos contienen nicotina, plomo, arsénico y otras sustancias que afectan, muchas veces de manera irreversible, el sistema respiratorio y y cardiovascular del organismo de quienes fuman o quienes inhalan el humo (fumadores pasivos).
Un ex fumador se beneficia con la realización de alguna actividad física ya que, por minúscula que parezca, favorecerá su resistencia corporal al brindar una mayor cantidad de oxígeno a su cerebro, músculos y dará paso al bienestar integral.
A corto o largo plazo, la persona fumadora se da cuenta que este hábito limitó su capacidad física pues se cansa más rápido al caminar, se fatiga y se aceleran sus pulsaciones, e incluso aquellos que deciden empezar rutinas de ejercicios tardarán más de lo habitual en ver resultados positivos.
Así lo explicó la especialista física, Ileana Fermín, quien aconseja dejar el cigarrillo y al mismo tiempo, evaluar los métodos que seguirá para no reincidir.
“Hay personas que dejan de fumar, pero comen caramelos u otros dulces para combatir la ansiedad, entonces, bajan los niveles de nicotina, pero suben los niveles de azúcar en la sangre. Hacer esto no tiene sentido porque el organismo nunca va a estar en armonía”, indicó.
“Hacer ejercicio ayuda a dejar de fumar porque mantienes tu mente ocupada y no piensas tanto en el cigarro, controlas ansiedad, drenas, entre otros aspectos. Además ayuda a nivelar el colesterol, respirar un poco mejor, regular la hemoglobina. Es la mejor opción para sobrellevar ese proceso”, recomendó Fermín.}
La campaña del Día Mundial Sin Tabaco de 2022, impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), busca concientizar con el lema “El tabaco, una amenaza para nuestro medio ambiente”, y hacer visible cómo esta industria afecta al planeta desde su cultivo y producción, su distribución hasta los daños por los residuos que genera.