Todos los expertos en energía eléctrica, investigadores e incluso exgerentes de empresas de servicio eléctrico en Venezuela coinciden en que las graves fallas en el servicio de electricidad, que hoy azota a Maracaibo, una de las capitales más calientes del país y a todo el estado Zulia y en menor medida a otros estados del país se debe a la desinversión.
El recién electo gobernador Omar Prieto creó la secretaría regional de Asuntos Eléctricos y puso al frente al ingeniero Juan Boscán, ello no ha resuelto en lo más mínimo el problema si medimos como resultado la situación actual del servicio eléctrico.
Aquí están algunas clave de la gravedad del asunto de los apagones. Algunos aclaran que no son «apagones» sino esquemas de racionamiento o administración de cargas, a los efectos, es decir, al final de la película, viene siendo un apagón.
Desde el 23 de diciembre, Maracaibo, San Francisco y otras regiones del Zulia vienen padeciendo sacudidas eléctricas y apagones de dos, tres y hasta cuatro horas. Desde entonces, el problema no se ha resuelto.
El presidente Nicolás Maduro atribuyó las fallas a un «robo de cables» y aun «sabotaje» ordenado incluso desde el «imperio norteamericano». Más adelante, el gobernador Omar Prieto y su secretario de Gobierno refrendaron la tesis y crearon la descrita secretaría de Asuntos Eléctricos, entre otras cosas, para «defender las subestaciones de ataques vandálicos propiciados por la oposición».
Prieto aseguró que «los cortes eléctricos cesaron en su totalidad, solo se producirán eventuales interrupciones cuando se haga algún trabajo de mantenimiento en alguna subestación, pero el problema está arreglado». El secretario de Gobierno aseveró recientemente que «el sistema eléctrico está normal, todo funciona con total normalidad, hemos hecho un gran esfuerzo para neutralizar los ataques a las estaciones eléctricas y cuando amerite una interrupción del servicio lo informaremos con antelación».
Las dos aseveraciones están muy lejos de lo que en realidad sucede. Los apagones siguen a la orden del día y todos los días se producen a destiempo. Nadie sabe cuándo y a qué hora le cortarán la luz. Se va al mediodía, de tarde, en la mañana y muy por la noche cuando ya la gente está descansando.
¿Desmontando el embuste?
Según el análisis de los expertos en el área eléctrica, miembros del Grupo Ricardo Zuloaga y profesionales zulianos conocedores del Sistema Eléctrico Nacional, José Aguilar y Ciro Portillo, este último exejecutivo de Enelven, extinta empresa que administró el servicio eléctrico en el Zulia, la tesis del sabotaje es «el más grande embuste» que el Gobierno se haya podido inventar y lo sustentan bajo el criterio que publica el portal informativo El Pitazo, de la siguiente manera:
– Aguilar y Portillo consideran que la versión del sabotaje no es más que una excusa para tapar el verdadero problema. “Si existe algún sabotaje, es el que ocurre alrededor de las plantas termoeléctricas”, destacó Aguilar.
– Maracaibo tiene cinco plantas termoeléctricas: Termozulia, con capacidad de 1300 Mw, la Ramón Laguna con 660 Mw; la Rafael Urdaneta con 360 Mw; Bajo Grande con 100 Mw y la Vencemos con 10 Mw, para una capacidad instalada de 2.430.
– Ambos expertos coinciden en que la generación termoeléctrica efectiva de las plantas maracaiberas no supera los 600 Mw.
– Aguilar dice que las plantas pudieran trabajar con gas, pero al Zulia solo llega 6% del gas natural que se produce para la generación de electricidad. En cambio, se utiliza 62% gasoil que produce Pdvsa con el objetivo de generar termoelectricidad.
-La demanda mínima de Maracaibo es de 1.100 Mw, la máxima 1.600 Mw en estos momentos. Significa que con la capacidad instalada en la ciudad se atendería la necesidad de energía.
– Como respaldo a la generación termoeléctrica, Maracaibo recibe 1.000 Mw desde el Guri, a través de un entramado de red de transmisión que inicia en la mayor central hidroeléctrica del país en el estado Bolívar, pasa por Yaracuy y llega a la Costa Oriental del Lago, antes de tocar Maracaibo.
– Desde la Costa Oriental del Lago, la transmisión de respaldo se conduce por tres vías. Una línea de 400 kilovatios (Kv) que va por 12 torres sobre el Lago de Maracaibo; dos líneas de 230 Kv, una de ellas sublacustre y la otra pasa por debajo de los ocho kilómetros del puente Rafael Urdaneta.
– Según Ciro Portillo, la que pasa por debajo del puente está fuera de servicio y la sublacustre fue la que falló el 23 de diciembre de acuerdo con la versión oficial.
– Sobre las torres que soportan las torres de 400 Kv, el Colegio de Ingenieros del Zulia y la Universidad del Zulia han alertado que las estructuras corren el riesgo de caerse debido a los efectos de la corrosión y falta de mantenimiento. “La caída de esas torres obligarían a un racionamiento de hasta 70 % de la energía por varios meses. Sería insoportable”, resalta Portillo.
– Para los expertos no hay garantía de que Maracaibo reciba los 1.000 Mw. Aguilar dice que todas las plantas termoeléctricas del país tienen problemas, de allí que los 11.000 Mw que salen del Guri deban distribuirse antes de llegar a la capital zuliana, que es la cola del Sistema Eléctrico Nacional.
– De allí la importancia de que las plantas termoeléctricas de Maracaibo generen al menos 1.600 Mw para una mayor seguridad energética de la ciudad.
– Para ello se requieren inversiones en dólares para realizar el mantenimiento rezagado a las turbinas, las cuales se desgastan más rápido cuando funcionan con combustible como fuel oil o gasoil, explica Aguilar.
– Este 29 de diciembre hubo menos racionamientos, según reportaron usuarios. Fuente de Corpoelec asegura que el gobierno canibalizó Planta Centro, en Carabobo, para atender la emergencia en el Zulia. Temprano, el gobernador Omar Prieto informó que se activó una línea de 230 Kv desde la subestación Cuatricentenario, al norte de Maracaibo y agregó que se adelantan los trabajos para reparar la línea sublacustre de 230 Kv.
– Aguilar explica que desde las 10 de la noche del 29 a las 7 de la mañana del 1° de enero, se da regularmente la más baja demanda en energía eléctrica en el país.
– Representantes señalaron que el 30 se regularizaría la situación. Aguilar advierte que de ocurrir racionamientos el 31 de diciembre, se revelaría la gravedad del asunto.
– Pero nada pareciera indicar que los racionamientos no continuarán cuando la demanda aumente, sobre todo a partir del 15 de marzo, cuando regularmente se incrementa el consumo eléctrico en el país.
– En caso de emergencia, una solución sería importar 150 Mw de Colombia. La construcción de una nueva red sublacustre tardaría dos años, según Portillo.
NOTIZULIA / Con información de El Pitazo