Eveling de Rosales tenía previsto hacer ayer la entrega formal de la Alcaldía de Maracaibo a su sucesor, el oficialista Willy Casanova, quien -a su juicio- fue el resultado “de la crisis y la falta de unidad en la oposición”.
Se va satisfecha de su gestión en los dos períodos que estuvo al frente de la municipalidad. “Dificulto que otros pudieran haber hecho lo que yo hice en momentos duros, donde la hiperinflación y la falta de presupuesto asfixiaba”.
Celebra que se va sin deuda con los trabajadores y espera que el nuevo alcalde marabino gobierne para todos.
– Hay un nuevo alcalde, ¿cómo ve usted la elección de Willy Casanova?
– Muchos se preguntan de dónde salió Willy. Salió de la crisis, de la falta de unidad, de ese sentimiento malo, mezquino que algunas veces tenemos que decir “quítate tú, para ponerme yo”. Este pueblo decidió que fuera Willy. Hoy Maracaibo por primera vez está triste. Lo más importante es la reflexión: ¿era necesario cambiar a un opositor por un oficialista? ¿Era necesario jugar al fracaso de otro para castigar a un partido que simplemente decidió luchar y conquistar los espacios? No hablo como la esposa de Manuel Rosales, hablo como la primera mujer alcaldesa de este municipio.
– ¿Cómo termina su gobierno?
– Tuvimos un programa de gobierno que fue asfixiado, maltratado, que nos quitaron las regalías petroleras, las retenciones, los pagos de los servicios públicos, los impuestos, no nos daban los créditos, pero mantuvimos el barco a flote. Gradué 20 mil estudiantes y nunca le pedí un carnet político. Goberné para Maracaibo sin color ni distingo político, espero que Willy haga lo mismo y ayude con programas sociales y becas a los jóvenes de la ciudad.
– ¿Se va satisfecha o con un sabor amargo?
– Me voy satisfecha de haber cumplido a pesar de las dificultades y adversidades y de toda la asfixia del Gobierno, queriéndome arrinconar y sacar del juego. Me voy por la puerta grande, no me voy derrotada, me voy con la frente en alto, con un sentimiento de alegría por ser la representación de la mujer en esta ciudad. Dificulto que otros pudieran haber hecho lo que yo hice en momentos duros, donde la hiperinflación y la falta de presupuesto asfixiaba. Me voy solo debiendo el último aumento presidencial porque me hubiese ido en blanco.
– ¿Se va sin deudas con los trabajadores?
– No le debo nada a los trabajadores, pagué los aguinaldos y fideicomisos. Puse todo al día.
Dejo 20 mil jóvenes graduados, más de seis mil estudiando, 10 canchas de grama artificial, una biblioteca que está en 70 por ciento de construcción, porque nunca pude lograr que la Gobernación me ayudara.
– ¿Cuándo entrega la Alcaldía?
– Estoy preparada. Tengo mis cuentan claras. Será hoy (ayer), mañana, cuando Willy envía la comisión de enlace. Tony Boza será el encargado por ellos, y Marisabel Rosales y Elsa Fernández de nuestra parte.
– ¿Conversó con Willy Casanova?
– Sí, esta mañana (ayer) me llamó y nos pusimos de acuerdo. Nos vemos esta noche (ayer) para hacer la entrega formal.
