Luisa Ortega Díaz, exfiscal de la República tras la destitución por parte de la Asamblea Nacional Constituyente, reveló que para salir del país recibió ayuda de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
“Fue una noche. Fue corto. Recibí la ayuda de muchos venezolanos, incluso funcionarios de la GNB que me trasladaron de Caracas a otro sitio”, narró Ortega Díaz durante una entrevista con el canal colombiano NTN24.
La fiscal indicó que, debido a posibles represalias del Gobierno en contra de quienes la ayudaron, no daría demasiados detalles.
“Ha sido una persecución en contra de los que presumen que me ayudaron”.
Sobre la noche que abandonó el país, la fiscal indicó que se fue con un morral en el que guardó “lo fundamental”.
Ortega Díaz agradeció el recibimiento que le brindó Colombia, al recibirla como una más. “Lo que más me sorprende es la gente en la calle. Me dicen que siga luchando, que no abandone la lucha”.
Además, afirmó que le hizo saber al presidente Maduro, la última vez que se reunió con él, que el país no estaba para celebrar y para bailar en televisión abierta, como suele hacerlo constantemente el Presidente.
“Él me dio sus puntos de vista, una de las cosas que considero es que en Venezuela no hay motivos para celebrar y yo lo observaba siempre bailando, en ese momento que un grupo de venezolanos perdió su vida, yo se lo hice saber”.
Habló sobre cuando se dio el punto de quiebre entre su gestión y la línea que llevaba el Gobierno. “El punto de quiebre fue el día que me paré a presentar mi informe anual, cuando denuncié la ruptura del orden constitucional, cuando denuncié unas sentencia del ilegítimo Tribunal Supremo de Justicia, aunque ya había hecho objeciones a las OLP. Son conductas que no podía avalar, tenía que rechazar y lo tuve que hacer públicamente”.
“Yo tengo organizados algunos casos que son de impacto para la colectividad y han hecho más daño al país. Todas las calamidades que tiene Venezuela en este momento son producto de la corrupción”.
