El ejecútese del decreto de reducción del Impuesto al Valor Agregado, en tres o cinco por ciento, para las ventas de bienes muebles y prestación del servicio, fija una situación “perversa y premeditada de los legisladores que están al servicio del régimen, cuya propuesta de Ley, parecerá estar destinada a golpear y acorralar al pequeño y mediano comerciante, que a resolver el problema del efectivo, en el último trimestre del año”, acusó Elio Rivas, presidente de la Ucez.
El dirigente explicó en rueda de prensa que “los pequeños comerciantes no tienen capacidad de cumplir la rebaja del IVA” por las limitaciones inmediatas: aumento de los costos por más adquisición de talonarios de facturas o de máquinas fiscales para el registro de operaciones.
Ejemplificó el caso de las ventas de pastelitos, donde se reportan más de 200 transacciones diarias, con un talonario de 50 registros a 100 mil bolívares el costos, se ocasionan gastos millonarios para el pequeño comercio.
Detalló que se “requeriría de cuatro talonarios diarios, 28 por semana, 112 por mes, y 336 hasta el 31 de diciembre, fecha de terminación de la vigencia del decreto – de rebaja- . Ese comerciante tendría que invertir al día 33 millones 600 mil bolívares, para cumplir con los caprichos del decreto y la providencia o cambiar el sistema de facturación de registradora a impresora fiscal, cuyo costo oscilaría entre 20 y 25 millones de bolívares”.
La Ucez alertó que los comerciantes que cumplan el registro formal y la rebaja del IVA “serian objeto de algún tipo de ‘matraca’ por parte de los funcionarios, además de multas y cierres” por las limitaciones de adecuarse a la normativa ordenada por el Gobierno nacional y en disposición de vigilancia del Seniat.
Rivas pidió en representación del gremio suspender la vigencia del decreto 3.085 y la providencia 048 para revisar las incidencias que ocasiona hasta a los emprendimientos. En una encuesta a sus afiliados determinó que 88 por ciento que los consultados no tienen “capacidad económica para comprar talonarios, en caso que, su sistema de facturación actual no pueda adaptarse a las formalidades tributarias”.
