Distintos gobiernos de la región expresaron ayer su preocupación por la situación en Venezuela, luego de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) asumiera las competencias del Parlamento; mientras que la Unión Europea solicitó un «calendario electoral claro» y respeto a la Asamblea Nacional.
Estados Unidos denunció que la «usurpación» del Poder Judicial es «una ruptura de las normas democráticas». Además, señaló que el dictamen «daña en gran medida las instituciones democráticas de Venezuela y niega al pueblo venezolano el derecho de moldear el futuro de su país a través de sus representantes elegidos». Por ello, el Departamento de Estado norteamericano concluyó: «Lo consideramos un grave revés para la democracia en Venezuela».
El canciller mexicano, Luis Videgaray, aseguró que su gobierno está preocupado por lo que considera un «deterioro del orden democrático» del país bajo el régimen chavista.
La representante del gobierno de Juan Manuel Santos también se sumó a la condena. «Rechazamos esta no división de los poderes. Acá es clarísimo que necesitamos unos poderes públicos fuertes, independientes, para poder fortalecer la democracia», dijo Holguín en rueda de prensa. En un comunicado emitido poco después por la Cancillería colombiana, el gobierno colombiano señaló su «profunda preocupación» por la decisión.
Repudio
Por su parte, Brasil emitió una nota con un tono de condena hacia el dictamen. «El gobierno brasileño repudia la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Venezuela que retiró de la Asamblea Nacional sus prerrogativas, en una clara ruptura del orden constitucional».
A su vez, el gobierno de Chile expresó su «más alta preocupación» por la decisión de la Corte Suprema. «Esta situación nos lleva a consultar con los países amigos cómo proceder de ahora en adelante», agregó el canciller Heraldo Muñoz, quien también reafirmó lo expresado por 20 países durante una sesión en la OEA en la que pidieron pasos concretos en el organismo para lograr un mayor diálogo y que el país salga de la crisis.
En tanto, la Unión Europea pidió a este un «calendario electoral claro» en Venezuela y llamó a «respetar la Asamblea Nacional y a todos sus miembros», después de las controvertidas decisiones de la justicia chavista, a través de un comunicado del Servicio Europeo de Acción Exterior.
El gobierno de Panamá también expresó «profunda preocupación» por la decisión del Supremo de Venezuela de asumir las competencias del Parlamento, e hizo un llamado a que en ese país se respete el orden constitucional y la democracia.
NOTIZULIA / La Verdad