El sicario fingió ser un cliente, llegó ayer en la mañana a la joyería de Reinaldo Morales, en el casco central de Cabimas, y apenas le abrieron la puerta acribilló al comerciante. La Policía investiga el asesinato como un ajuste de cuentas. Es el tercer homicidio de un miembro de la familia en seis años.
Los testigos contaron a los oficiales que Morales recién llegaba a su negocio. Escuchó la puerta, invitó a pasar al presunto cliente y este le disparó unas 15 veces, algunos de los proyectiles atravesaron la cabeza. El verdugo del joyero salió después de cometer el crimen con el arma en la mano y corrió hasta la esquina, donde un motorizado lo esperaba y logró huir.
Los comerciantes adyacentes se asustaron al escuchar las detonaciones y cerraron las puertas de sus locales, estaban incrédulos ante lo vivido.
El establecimiento se ubica a escasos metros del comando del Cuerpo de la Policía Bolivariana del estado Zulia, situación que reprochan los lugareños porque no hay respeto hacia los organismos de seguridad. Rápidamente el área fue resguardada, mientras esperaban la llegada del cuerpo detectivesco.
Los funcionarios de la Policía científica indagan el homicidio. Fuentes ligadas a la investigación informaron que averiguan si este asesinato guarda relación con la muerte de alias el «Jofran», mano derecha de la familia a quien asesinaron hace una semana en el sector El Golito.
Primeros ataques
En siete años, los Morales han sufrido dos bajas en manos del hampa organizada. En el primer ataque acribillaron, el 19 de agosto de 2010, de 26 tiros a Raúl Enrique Morales, de 36 años, y a su amigo, Jorge José Tapia (19), en la carretera F de Cabimas. A su homicida, Carlos Alfredo Áñez Meléndez (23), alias el «Cachi», lo mataron de 47 tiros, ocho meses después del crimen.
El 31 de mayo de 2011 hubo el segundo y más sentido ataque. Al empresario Hugo Enrique Morales (42) y a su novia Karen Virginia Blanco (26), los asesinaron en el estacionamiento del salón Sicilia, en la calle Cecilio Acosta de Maracaibo. La Policía científica vinculó el homicidio a la banda del «Chamut», atrapó a los sicarios y el tribunal los condenó a 24 años y seis meses de prisión.
NOTIZULIA / La Verdad
