Cinco días disfrutó Leandry Alberto Zárraga Sánchez (23) de su libertad. Escapó junto a José Rafael Herrera Romero (55), Edinson Antonio Martínez Tovar (44), nacionalidad colombiana; y Alexánder Rafael González Viloria (25) de los calabozos del comando de la Policía regional, en La Concepción. Se refugió en la casa de su mujer, Lee del Carmen Molero Millán (38). Una comisión arribó a su guarida, liquidó al ama de casa y al fugitivo.
Se resistió a la autoridad, repiten cada uno de los reportes de los cuerpos de seguridad. Molero y su pareja usaron un revólver, calibre 38; y una escopeta, calibre 12; para enfrentarse a los funcionarios que llegaron ayer, a las 12.00 del mediodía, a una casa sin número en la calle principal del sector Roberto Fuenmayor, parroquia José Ramón Yépez, en el municipio Jesús Enrique Lossada.
Los vecinos recordaron las detonaciones, pero ninguno presenció el enfrentamiento. Los dos cuerpos los montaron en una patrulla y se los llevaron del sector. A los pocos minutos se enteraron que ingresaron sin vida en el ambulatorio III La Paz.
Uno de los oficiales explicó que a Zárraga lo apodaban el «Causa» y a su mujer, la conocían como la «Lizz». A él lo detuvieron el 25 de agosto por robo agravado. Ella pertenecía a su banda. No dio mayores detalles sobre su prontuario, pero la describió como peligrosa.
Los prófugos
El patrullaje por la localidad y los municipios aledaños se mantiene. Aún buscaban a los otros tres evadidos. Hasta ahora no hay una ubicación clara sobre sus guaridas.
Los cuatro reos escaparon, entre el jueves 24 y el viernes 25 de agosto, de la estación policial La Concepción. Violentaron unos barrotes de hierro del calabozo. Primero huyeron dos y luego otros dos. «Iban a ser más los fugados, pero alias ‘Orvi’, quien es el líder negativo de ese recinto, no podía escapar porque es de contextura gruesa, por eso no dejó que más nadie se fugara”, detalló un oficial.
A Herrera, Martínez y González los encarcelaron por los delitos de intento de feminicidio, robo agravado y porte ilícito de arma de fuego. Por la evasión activaron un despliegue policial por las cuatro parroquias del municipio. Un informante delató donde y con quien se refugiaba Zárraga. Allá llegaron a recapturarlo, al negarse lo ultimaron junto a su acompañante.