Vecinos de varias parroquias zulianas claman por agua.

Vecinos de varias parroquias zulianas claman por agua.

NotiZulia / Prensa Regionales

En esta ocasión les tocó el turno a los habitantes de la urbanización La Floresta, parroquia Raúl Leoni, quienes manifiestan que: la última vez que vieron el vital líquido, fue en la  temporada de lluvias del 2021, donde pudieron llenar cuanto potes tenían a su alcance.  

Y es que ellos mismos manifiestan, no saber quien vive en esa urbanización que le caiga mal al Gobierno, ya que aproximadamente llevan 4 años padeciendo por el vital líquido y solo queda el triste recuerdo de lo que alguna vez salía por sus tuberías a cantaros.

“A no se quien, el que sea el encargado de darle vuelta a la llave para que nos llegue el agua otra vez, le recuerdo que aquí vivimos seres humanos y que con lo poco que ganamos,  no podemos darnos el lujo, porque es un lujo, comprar agua a un camión cisterna”.  

Víctor Urdaneta,  Vecino del Sector.   

Los vecinos de las calles 79A, 79B, 79C, y 79D, de la Urbanizacion la Floresta, cuentan el calvario que tienen que hacer para lavar su ropa, asear su casa, inclusive manifiestan que tienen que utilizar en muchas ocasiones, el agua destilada de los aires acondicionados, para bañarse o bombear los sanitarios.

Indican que en épocas de la Venezuela organizada donde todo funcionaba, ellos como usuarios pagaban con gusto sus respectivos recibos de servicios públicos.

“Daba gusto ir a pagar los servicios públicos, porque si se iba la luz, con una simple llamada en cuestión de minutos, venían a corregír el problema. Así pasaba con el agua, el aseo urbano con todos los servicios, hasta con CANTV. Nosotros no pedimos nunca dejar de pagar, prefiero hacerlo mil veces pero que los servicios funcionen; por eso hoy día nada sirve, nada funciona”.

Bertha Rodríguez, vecina afectada.

En la red social Facebook de NotiZulia,  hemos tomado varias apreciaciones de personas que hacen sus comentarios con relación al tema del agua y el sufrimiento que significa para ellos, tener que vivir en zonas donde padecen por las fallas en el suministro, que en el peor de los casos, se vuelve una ausencia total del mismo.