En medio del creciente caos vehicular que afecta a la ciudad, ciudadanos y organizaciones sociales hacen un llamado urgente a reforzar la conciencia vial y el respeto por las señales de tránsito, especialmente los semáforos en rojo, cuya violación se ha convertido en una práctica común y peligrosa.
Durante las últimas semanas, se han reportado numerosos accidentes en intersecciones clave de Maracaibo, muchos de ellos provocados por conductores que deciden ignorar la luz roja. Esta conducta no solo representa una infracción legal, sino una amenaza directa a la vida de peatones, ciclistas y otros conductores.
“Pasarse un semáforo en rojo no es una travesura, es una irresponsabilidad que puede costar vidas”, expresó un vocero de una organización comunitaria dedicada a la seguridad vial.
A pesar de que algunos semáforos han sido reparados en avenidas principales, la falta de respeto a las normas de tránsito sigue siendo alarmante. La ciudadanía reclama una transformación cultural que priorice la vida y el respeto mutuo en las calles.
Como parte de esta iniciativa, se están promoviendo acciones como:
- Campañas educativas en redes sociales y medios comunitarios.
- Charlas en escuelas y universidades sobre seguridad vial.
- Activaciones urbanas con mensajes visuales en cruces peligrosos.
- Participación de vecinos y líderes comunitarios en jornadas de concientización.
El mensaje es claro: detenerse ante una luz roja no es una opción, es una obligación moral y legal. Solo con una ciudadanía comprometida y consciente será posible reducir los accidentes y construir una ciudad más segura para todos.